Veintitrés
CON ANTONIO LÓPEZ.
AGOSTO DE 2006 (2ª parte)
Mis sandías.
Patricia y los melocotones aplastados.
Julio López me cuenta su obra, fue un placer escucharle, la verdad.
La clase de pintura.
...Y la inolvidable lechuga de Antonio Mateos.
El taller de escultura.
El taller de pintura al atardecer.
Mis sandías.
El 26 de junio de 2006 yo debía entregar mi menina al Museo del Prado.
A primera hora del día recibí la llamada de una encargada del área de educación, pidiéndome que me adelantara en lo posible, dado que se iba a celebrar un acto solemne a lo largo de la mañana, el acto era la entrega del premio Velázquez al pintor Antonio López.
A mediodía, escuché en la radio la noticia, en ella se resaltaban algunas palabras del pintor, interesantes como para que me dieran ganas de buscar su discurso, baste decir que soy un poco pato buscando por Internet, pero en esta ocasión encontré la reseña de este curso que se celebraría los primeros días de agosto en el Palacio Los Serrano, sede cultural de la Caja de Ávila, con quién precisamente el invierno pasado había realizado unas exposiciones itinerantes, otra coincidencia.
Tuve la suerte de resultar seleccionada para participar en el curso.
...Tuve mucha mucha suerte porque, en esta ocasión, encontré algo más que palabras.
posted by tintatenta at 1:51 a. m.
2 Comments:
Hola, todas las pinturas que alcanzo a ver en las fotos, me parecen bellas, ......me encantaria participar en un taller así. Mi padre pinta muy lindo y varios de mi familia también lo hacen, creo que yo podría aprender muy bien, por ahora me quedo con el mural que estoy pintando para la pieza de mi hijo.
Saludos desde el fin del mundo...Chile
Muchas gracias Ale por tus comentarios.
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