Doce

"Girasolo"
Acrílico sobre tabla
77 x 122 cm.

Tengo pocas oportunidades de dirigirme al público, pero intento que cada pincelada que atraviesa mis manos lance hilos de comunicación hacia el mundo en el que vivo, aunque a veces pueda dar la impresión de que los que vivimos en silencio no existimos. A su vez, yo conozco el mundo a través de la pintura, por eso, desde donde lo veo, el mundo me parece hermoso y misterioso. Las flores son un pretexto para pintar, pero llegar al centro de una flor para mí es llegar al centro mismo de la vida.

Siempre me queda la duda de si estoy dedicando mi vida a lo que debiera, supongo que nos ocurre a muchos, uno querría intervenir en el dolor, intento que mi pintura traiga un soplo de alivio; en ese aliento, en ese empeño sutil pero persistente ocupo mi tiempo y mi vida.

Hoy se me ha dado la oportunidad de compartirlo con ustedes y de darle a este “Girasolo” un buen fin y estoy agradecida por ello.

No me queda más que agradecerles también a ustedes su presencia y su apoyo a estos “Latidos de arte” que nos reúnen hoy aquí.

Muchas gracias.

Once

Tulipa purísima
Acrílico sobre tabla
61 x 175 x 15 cm.

Este es una de las obras que he dedicado a los tulipanes blancos.

La historia es bien sencilla, un día fuí al jardín botánico y encontré estas flores entre sol y sombra, recién abiertos sus pétalos, deben durar muy poco en este estado, por eso no identificamos esta imagen con la habitual de los tulipanes.

Estas flores así abiertas como por descuido, recibiendo la luz matizada del sol, exhibiendo una blancura imposible donde se adivinan por fin todos los colores en mil matices, es una de esas cosas que...

Presenté este cuadro al 73 Salón de Otoño 2006 de Madrid. Resultó seleccionado para participar en la exposición.

La organización de este concurso, por cierto, deja un poco que desear. Se permiten el lujo de transportar las obras del almacén a la sala de exposiciones y viceversa sin ningún tipo de embalaje, aunque uno se haya molestado en dejárselo al alcance de la mano. Por supuesto no se hacen responsables de los desperfectos porque dicen que ya lo advierten en las bases, (en ningún apartado de las bases advierten de que las obras en tres dimensiones deban ser enmarcadas). Me pareció que no estaba a la altura de lo que debiera ser el Salón de Otoño de Madrid, auspiciado por el Ayuntamiento de la ciudad. Hay concursos en otras provincias, incluso en pueblos más pequeños, en los que tratan infinitamente mejor las obras.

Aquí otro cuadro con tulipanes. Los títulos, en este caso, son el propio nombre científico de la flor, creo que no se puede contar mejor.



"Tulipa purísima"
Acrílico sobre tabla.
100 x 195 cm.

Diez

Carmen Varela para Estampa 2006

XIV SALON INTERNACIONAL DEL GRABADO

Y EDICIONES DE ARTE CONTEMPORANEO

del 30 de noviembre al 4 de diciciembre, de 11 a 21 h.

Para esta edición de Estampa he preparado una colección giclées que presento acompañados de sus bocetos originales montados sobre tabla.

Entre ellos se encuentran unos cuantos pensamientos de colores, magnolias, strelitzias y otras flores cuyas líneas más o menos redondeadas y sus colores vibrantes ejercieron en su día sobre mi mirada (que es muy mirada) y mi pensamiento (no digo nada) un efecto hipnótico del que todavía no me he recuperado.

Sus formas, además de más limpias, son mucho más intrincadas e infinitamente más hermosas que la M 30 madrileña y sus colores hacen enrojecer al mismísimo camaleón que mezcla los tonos en la casa Titán.


"Pensamiento azul"
40 cm. O
Boceto original para giclée

"Vida silenciosas IV"
19 cm. O
Boceto original para giclée

"Pensamiento rosa"
40 cm. O
Boceto original para giclée

"Pensamiento azul"
19 cm. O
Boceto original para giclée

"Composición amarilla"
19 cm. O
Boceto original para giclée

"Cala"
40 cm. O
Boceto original para giclée




"Vidas silenciosas VI"
40 cm. O
Boceto original para giclée


"Vidas silenciosas IV"
25 cm. O
Boceto original para giclée

Nueve

"Flores líquidas"
122 x 222 cm.
Acrílico sobre tabla.


Estoy releyendo "Los libros de Terramar" que entre otras muchas cosas habla de la importancia de los nombres. Este cuadro tiene una historia larga para su edad, una historia que me da bastante pereza contar, así es que solo contaré el final. Al poco de recibir su segundo nombre "Flores líquidas" vino un señor que dijo vivir frente al mar y se lo llevó.

Hasta la fecha es el cuadro más grande que he pintado. Aprendí mucho durante su realización. También aprendo muchas cosas sobre las personas a base de pinceladas, a veces los cuadros se convierten en espejos donde las personas te dan su verdadera cara, bueno, unos te dan la cara, otros solamente te la muestran y otros lo que querrían es quitarte la tuya.

Ocho

“La estrella fugaz” nació un día en el que me invitaron a una exposición colectiva. La galerista levantó su dedo índice y dijo simplemente “hace falta un cuadro para esa pared”

Aquella pared de repente me pareció muy importante y pensé que tenía que resolver el problema de la mejor manera posible.

Me puse a revisar todas las imágenes que tenía para dejarme seducir por alguna historia, al final me decidí por esta que me había regalado un amigo. Sobre la muchacha anónima de la foto comencé la construcción de este cuadro, que por otra parte es el único que se ha basado en una fotografía que no he tomado yo.



Este cuadro y yo nos fuimos haciendo, como en un espejo.
Varias veces estuve a punto de dejarlo por razones que no vienen al caso.
Le envié al fotógrafo imágenes de la transformación de su fotografía en pintura con los añadidos que yo había hecho. En una ocasión llamó para decirme que no le gustaba nada el resultado y que no dijera que aquella foto tan mala era suya, le dije que pensaba que era capaz de hacer cuadros medio buenos con fotos medio malas, pero ahí pudo naufragar el trabajo porque a veces este tipo de comentarios pueden hundirlo a uno.
…No obstante decidí continuar y creo que fue para bien, porque es uno de mis cuadros favoritos.




"La estrella fugaz"
122 x 120 cm.
Acrílico sobre tabla

Me gusta esa chica anónima que supuestamente mira al que mira, que camina contracorriente aportando notas de colores a una ciudad gris y llena de obras.

En cuanto al título, la estrella fugaz era un anillo luminoso con forma de estrella que me regalaron y que se extravió rápidamente. El anillo por tanto no se encuentra aquí para contar más cosas sobre si mismo, simplemente perdió su luz y desapareció.
Me gustó concederle a esa estrella la posibilidad de permanecer hecha pintura dejando en la misma permanencia la constancia de su fugacidad.




Esta primavera presenté el cuadro al primer concurso de pintura figurativa de la Fundaciò de les arts y els artistes y fue seleccionado para aparecer en el catálogo lo cual me hizo sentirme muy honrada porque entre los cuadros ganadores y los seleccionados encontré obras de muy buena calidad.

“…Una vez me dijiste que me ibas a contar la historia de ese cuadro que mandaste, de una niña con trenzas, y la estoy esperando hace más de un año.
¡ que cosas ! imprimí el cuadro y lo tengo pegado en el cuaderno de composición de este año, es que me siento identificada, soy yo, soy yo.
Bueno… cuentame, un besote y chao”.

…Ayer, mientras escribía la historia de este cuadro, recibí este mensaje de mi amiga Mandia que vive en Chile, qué coincidencia ¡qué cosas!... y es que a veces las historias tardan en ser contadas.
También es un honor para mí que alguien ponga una imagen de mi cuadro en su cuaderno al otro lado del mundo.

Siete

"La pequeñez de lo grande"
Acrílico sobre tabla.
130 cm. O

Y el cielo, ocupado como está en su perpetua y minuciosa caligrafía, siempre tiene algo para regalarnos, la luz que refleja mezclada con el agua de las nubes (la acuarela perfecta) se convierte en colores imposibles que aclaran nuestra mirada y nuestra vida.

Seis

"La grandeza de lo pequeño I"
Acrílico sobre tabla
150 cm. O

La naturaleza es el límite del mundo.

Mi mirada recorre sus contornos y recoge de ella líneas frágiles y sinuosas que mi mano traslada con sumo cuidado al interior del círculo.

Guardo estas líneas como tesoros.

Con ellas dibujo mis mapas sobre los que repaso con mis dedos cada recodo de sombras inolvidables.

Siguiendo estas líneas siempre sé hacia donde ir.


Las naturalezas muertas son los límites de algunas naturalezas humanas.